martes, 21 de noviembre de 2017




EL TEJAR  DE CUENCA, SIGLO XVIII.

Por: José Luis Espinoza E./2017.



ANTECEDENTES.
Un bosquejo de los Tejares de San Sebastián en 1764, elaborado por un litigio de tierras con Juan Rondón, nos permite hoy dilucidar algunos aspectos relacionados con la ciudad de Cuenca. El tema cobra importancia en cuanto conoceremos muy poco de cómo estaba configurado ese sector al occidente de Cuenca y la infraestructura con la que contaba la ciudad en el S. XVIII. El croquis colonial ha permitido ser identificado exactamente en el sitio actual, por lo que en este estudio  analizaremos además algunos aspectos importantes de la historia local,  no tratados todavía. El esbozo, es de propiedad del señor Enrique Muñoz Larrea y fue tomado de la portada del Cuarto Libro de Cabildos, editado por la XEROX del Ecuador.

LOS TEJARES.
Los Libros de Cabildos tempranos de Cuenca, refieren de la existencia de los tejares al occidente de ciudad en donde hasta la actualidad conocemos con el nombre de El Tejar. El lugar del bosquejo incluye precisamente lo que hoy son Las Pencas,  parte alta  frente al Hotel Oro Verde, hasta la vía de San Pedro del Cebollar.
Los Tejares, seguramente fueron ubicados allí desde muy temprano en la colonia por los españoles debido a que la calidad de la tierra era la más apropiada para la elaboración de tejas y ladrillos, una innovación europea en la nueva ciudad de Cuenca y que poco a poco fue creciendo y tomando importancia.
Más hacia Sayausí estaban también localizadas las Caleras que fueron utilizadas temprano en la edificación de las casas coloniales de Cuenca y también en este mismo lugar se encontraban las minas de mármol con que fueron cubiertas algunas fachadas de casas de comienzos del S. XX como son los grandes bloques del sócalo de la Catedral Nueva, la fachada de la Iglesia de San Blas, Banco del Azuay, Casa de la Bienal, entre otras construcciones.
Actualmente ladrilleras tejares y la extintas minas de cal y mármol han sido absorbidas por el desarrollo y el urbanismo y  no queda más que sólo modernas viviendas.

EL MOLINO DE AGUA.
Este canal de agua se llamaba “Río de molino” y que al parecer se remonta a la época precolombina, la toma estaba localizada a orillas del río Tomebamba, más abajo del río Balzay en las actuales calles César Andrade entre la 3 de Noviembre y la Ordoñez Lazo, desde donde atravesaba por un puente de arco sobre el ríachuelo Sacay, precisamente en la actual calle de Las Totoras en donde existe el puente de arco colonial por dónde pasaba el agua,  luego a la altura de la Virgen de Milagro cruzaba la moderna vía a Sayausí y bajaba a Cuenca por el filo del Barranco paralelo “al  camino grande de Bola”.  Seguía  por el barranco, frente al actual Hotel Oro Verde hasta las calles de las Pencas y El Tejar sector en el cual el canal se dividía en dos ramales, uno seguía por las calles las Pencas, Cayambe, calle Santiago Montalbán cruzaba la quebrada del Calicanto sobre el riachuelo Gallinazo y continuaba por la actual calle del Molino, pasaba a Cristo Rey bajaba a la calle Munoz Vernaza y B. Malo en donde los españoles construyeron temprano un molino de granos con dinteles incas traídos seguramente desde Pumapungo , en este sector lo llamaban por los años 50´s el “Cuchi Molino”, luego seguía por la actual III Zona Militar Hacia el Vecino y continuaba hacia “El Regadío” en Totoracocha  (Espinoza, 2011).

El otro ramal del molino, partía luego de pasar el puente de arco en el Parque del Tejar y bajaba por el barranco hacia San Sebastián. Evidencias de su paso se encuentran todavía en el Barranco atrás del Supermaxi en un área verde paralela a la calle de Los Laureles. En el Museo Arte Moderno se puede observartambién aún parte del canal que bajaba hasta Pumapungo en donde se encontraba el famoso baño ceremonial inca, construido con  sillares de piedra blanca y sobre el cual en 1542,  Núñez de Bonilla, sobrepuso el molino de granos.
Una foto de 1963, muestra todavía un poco el recorrido y la división de este molino de agua a la altura de Supermaxi en la Ave. de Las Américas.


EL PUENTE DE ARCO DE LADRILLO Y EL CANAL DE AGUA.
El arco o puente por el que atravesaba el canal, se encontraba en el cruce actual de las calles del Tejar y Las Pencas, lugar en dónde estaba todavía hasta hace unos diez años. Debajo del arco pasaban las aguas de la “quebrada seca de donde bajan las aguas cuando llueve”. Actualmente el lecho de la quebrada es una calle rellenada y el arco ha sido destruido o quizá se encuentre soterrado cerca al Parque del Tejar, en el lugar existen unas canchas y una pequeña área verde. Los moradores del lugar y aún los jóvenes todavía recuerdan haber visto el puente de arco de ladrillo colonial.


EL CAMINO DE CUENCA AL OCCIDENTE Y A LA COSTA.
En el bosquejo se encuentra el camino que partía desde Cuenca hacia Molleturo y la costa, se indica: “este es el camino Real… camino grande de Bola que baja para Cuenca…”. Vale  recordar que el Puerto de Bola era un puerto  exclusivo de propiedad exclusiva de la ciudad de Cuenca.


LOS TEJARES DEL REY.
Junto al puente arqueado del molino se observa una especie de torre, cerca a uno de ellos,  se dice que son los tejares del Rey, seguramente para distinguir de los tejares particulares que para esa fecha, tenían las iglesias, principalmente.


TIERRAS DE ALONSO PREGONERO.
Más arriba del canal, tenía sus tierras Alonso el pregonero. Los pregoneros eran quienes anunciaban algunas decisiones que tomaba el Ayuntamiento las cuales eran dadas a conocer a los vecinos de la ciudad; ellos lo hacían en alta voz usualmente en la Plaza Mayor.

TIERRAS DE ADRIÁN ORTÍZ.
Sobre las tierras del pregonero se lee también: “tierras de Adrían Ortíz y heredero del Ministro Diego Patiño de Narváez”. Al parecer Patiño de Narváez siendo sacerdote, tuvo algunos herederos.
Diego Patiño de Narváez, fue sacerdote de San Blas y también tenía seis hectáreas de tierras en Pumapungo, por 1660 murió y Juan de Velasco presentó  una demanda en los juzgados locales, en la que dijo ser hijo y heredero por derecho de Patiño (Jamieson 1999, 143).

EL CAMINO A SAN PEDRO DE CEBOLLAR.
En la parte superior del bosquejo dice: “Camino que baja de la sierra para la ciudad de Cuenca”, se trata de  la actual avenida llamada Abelado J. Andrade que va hacia San Pedro del Cebollar. De lo que se puede apreciar, esta vía ya estuvo allí desde aquella fecha.

PUTUCÍO.
En el extremo izquierdo de bosquejo se lee: “de esta parte en más de una legua está el sitio de Putucío”. Se trata del actual San Miguel de Putushío o el Pitoxio de la fundación de Cuenca , sector límite  al occidente de Paucarbamba.

CONCLUSIONES:

1.- Ladrilleras y tejares estaban localizadas en este sector desde los inicios de la ciudad española de Cuenca hasta 1980, cuando el crecimiento urbano destruyo gran cantidad de estas fábricas.
2.- En el bosquejo colonial se encuentra la unión o cruce del canal de agua con  “el camino grande de Bola”; lo que coincide en el terreno actual con la calles del Tejar y las Pencas, justo en el Parque del Tejar.
3.- Hasta el sector llegaba el “Molino de río” desde dónde se dividía en dos ramales; el un ramal bajaba por el filo del Barranco hasta Pumapungo y el otro tomaba la parte alta irrigando las tierras de Cullca, llegando hasta Totoracocha.
4.-La existencia de dinteles incas en el Molino hidráulico para moler granos en Cullca permite concluir de que este molino temprano era contemporáneo al de Todos Santos. Por otro lado, a comienzos de la Colonia se menciona a Cullca como Los depósitos, lo que nos hace colegir entonces de que esas tierras eran productivas y de que ya estaban irrigadas por el canal de agua de Cullca.
5.- Si en Todos Santos en 1542 Núnez de Bonilla instaló su molino hidraúlico debido a la existencia de una fuente de agua que abastecía anteriormente a unos baños rituales incas; se podría deducir entonces de que este canal ya existía desde tiempo de los Inkas.
6.- Durante este trabajo, algunas personas de avanzada edad, manifestaron que más arriba del moderno canal de agua potable del Cebollar, existió un canal de riego de tiempo de los Inkas, del cual dijeron que  casi no quedaba rastro alguno, sólo existe en la memoria de ellos y vale dejarlo escrito.


BIBLIOGRAFÍA:
- Achig, María Cecilia et al. 2008. Planos e Imágenes de Cuenca. EditorBoris Albornoz. Ilustre MunicipalidadCuenca.

-   uarto  Libro de Cabildos, 1575-1578. 1982. Transcripción, Juan Chacón Zh. Archivo Hisrico Municipal / Xerox del Ecuador, Cuenca.

-          Espinoza E. José Luis. El molino de Cullca y los dinteles incas. El Mercurio,  Noviembre 3 del 2011, Sección  Cuenca Hermosa: 4F, 5F, 6F, Cuenca.

-       Jamieson, Ross W. 1999. Domestic Architecture and Power. The historical Archaeology of Colonial Ecuador. New York: Kluwer Academic/Plenium Publishers.