Por: José Luis Espinoza E. /2009
PROPUESTA PREVIA LA DECLARACION DE “BIEN DE UTILIDAD PUBLICA O DE INTERES SOCIAL” DE LAS COLINAS RITUALES PRECOLOMBINAS Y DE SUS RESPECTIVAS AREAS NATURALES LOCALIZADAS EN LOS ALREDEDORES DE LA CIUDAD DE CUENCA.
ANTECEDENTES
Son funciones inherentes de las autoridades de las instituciones culturales y ambientales de Cuenca, investigar, preservar y difundir los valores culturales y ambientales de Cuenca y su área de influencia. En este contexto, debe promoverse la declaratoria de “Bien de Utilidad Pública o de Interés Social” de un corredor cultural y natural localizado en los alrededores de la ciudad de Cuenca.
La zona del proyecto comprende una serie de colinas que se ubican al norte, sur, este y oeste de la ciudad de Cuenca, junto a los ríos Tarqui, Yanuncay, Tomebamba, Machángara y Cuenca. Las colinas cuentan en sus cimas con abundantes remanentes culturales y ambientales, no investigados todavía; eslabones únicos y desconocidos de la prehistoria cuencana, corresponden posiblemente a los “Cañaris” precolombinos (500 a. de C. al 500 d. de C.) y a los incas (1460-1532), ancestros directos de los actuales pobladores de la ciudad de Cuenca.
La altura de los cerros no sobrepasa los 4.000 m.s.n.m. y gozan de una vista excepcional hacia el valle donde se asienta la ciudad de Cuenca, así como también del lado oriental, lugar potencial y de inminente crecimiento de la ciudad de Cuenca. Los montes en mención, son: Pachamama, Guagualzhumi, El plateado, Curitaqui y la laguna aledaña de, Quituiña. Más al sur se encuentran agrupados y en fila, el Halzhi-Cruzpamba, Cabullín, Rayoloma, Huanacauri, Gapal, Ictocruz Huacanguilla ohuca de la luna, Yahuarcocha, Verde, Monjas o Viripucara, y El Calvario (Papaloma). Al occidente le siguen el Huizhil Barabón y Cabogana con una serie de atractivos culturales y naturales.
La función ritual de estos sitios está determinada por su ubicación, ocupan preferentemente áreas planas en las cumbres de las colinas mencionadas, se encuentran en lugares no aptos para vivienda, no existen fuentes de agua cercanas; los terrenos son empinados y no idóneos para la agricultura. La posición este-oeste, la proximidad al gran valle de Cuenca y la presencia de los ríos en sus partes bajas, pudieran corroborar quizá, con su función. Esta área emblemática conforma una “Geografía Sagrada de Cuenca”, un lugar estratégico y privilegiado, donde antiguamente sus habitantes rindieron culto a sus deidades supremas. En este valle sagrado se emplazaron los cañares prehistóricos, de Guapodeleg cañari, la Pumapungo inca y la Cuenca hispana.
Entre estos sitios se encuentran dispersos los asentamientos humanos más antiguos de la región, como Challhuabamba de hace 4.000 años. En el Plateado se han registrado evidencias de fósiles del periodo Terciario. El Curitaqui, sitio arqueológico, registra leyendas orales trascendentales y centenarias. La laguna de Quituiña, única en este valle, recoge varias leyendas y constituye un recurso potencial para el turismo moderno. Cerca de las colinas referidas, en el sector de Jadán,(Hanan), sobreviven aun los últimos cañares o posibles mitimaes en el Azuay, de quienes no existe estudio alguno. Al occidente, en la misma ciudad de Cuenca se encuentran también evidencias de asentamientos que vienen desde hace 4.000 años. Por el Pachamama y Gapal atraviesa un segmento el Qhapac Ñan, importante arteria inka que unía a Quito con Cuzco, también candidato al título de patrimonio mundial. Esta arteria, consta como obra prioritaria de rescate, en la Constitución de la República. Una de las colinas, corresponde al Huanacauri, segunda divinidad inka después del Sol, y lugar en donde los miembros de la Misión Geodésica Francesa hicieron las triangulaciones en el siglo XVIII, el sitio se encuentra justo al lado oriental de Pumapungo. En las faldas del Huanacauri vía al Santuario del Niño de Praga, una colonia de cigarras chillan puntualmente a las 5: 55, durante 10 minutos, todos los días. En Turi, lugar turístico y balcón de la ciudad, todavía acuden los romeriantes del Señor de Belén a depositar sus ofrendas y llevan un poco de las rocas de la cueva que “bendicen” y “fertilizan” sus chacras.
El área en mención actualmente se encuentra amenazada y soporta una fuerte presión de deterioro, atribuida al permanente uso de los recursos energéticos a lo largo de miles de años y a los embates de la modernidad como son la incontrolada expansión urbana, la deformación del paisaje por efectos de la minería, la erosión y donde se pretende la forestación con especies exóticas que han destruido aún más los suelos con la consecuente desaparición de flora y fauna nativas.
La explosión demográfica y urbana de Cuenca han permitido que por las cañadas que fluyen entre estas colinas como las quebradas de Guzho, Mal Paso, El Salado y Ucubamba; la ciudad, se expanda hacia el lado oriental, lo que estimula a que las colinas en mención, comiencen a poblarse, creándose suburbios en áreas de alto riesgo para asentamientos humanos; acción que preocupa en el sentido de que podrían desaparecer estos espacios de alto valor simbólico.
Es tema central de esta propuesta no es sólo el rescate de nuestra cultura, sino, el generar en esta zonas, un símil de parque metropolitano “protegido”, que provea de oxígeno a esta ciudad, relativamente grande y conflictiva; de convertirla en una zona de entretenimiento y de que se convierta en un atractivo turístico que dinamice la economía local, en la que se reivindiquen espacios culturales como identitarios de los cuencanos.
A futuro cuando Cuenca crezca y sea una sola con Azogues, la ciudad, será tan grande que se iniciará en Tarqui y terminará en Biblián; para entonces, estas áreas protegidas serán los únicos pulmones verdes que quedarían al centro la gran ciudad. Este pronóstico no tardará mucho tiempo si consideramos las proyecciones de crecimiento demográfico que ha tenido los últimos cincuenta años, la ya estresante ciudad de Cuenca.
Por las características geográficas, ambientales, culturales y paisajísticas de estas colinas, existe, la instancia de proponer a la UNESCO, para que se agregue a los títulos de “Cuenca Patrimonio Cultural de la Humanidad” y al del Cajas como “Humedal de Ramsar”; además, la categoría de “Paisaje Cultural”, titulo honorifico internacional que ese Organismo otorga a lugares excepcionales, legalmente protegidos y será la oportunidad también para reanudar la gestión para la adhesión de la zona del Cajas, en la categoría de “Paisaje Natural”.
Es política del Gobierno Central, que el Ministerio de Turismo, promueva hasta el año 2.020, un plan de programas y proyectos turísticos que permitan sustentar a futuro la economía y desarrollo de Ecuador, por lo que este proyecto, estaría en perfecta concordancia con “PLANDETUR” (Plan de Desarrollo Turístico).
Este proyecto es integral y sus orientaciones son de tipo ambiental, cultural, social económico, urbanístico y turístico por lo que, en definitiva se enmarca perfectamente en el ámbito del “buen vivir” de los cuencanos, asunto previsto en la Nueva Constitución de la República del Ecuador.
Esta iniciativa involucrará, a futuro, la coordinación con otras instituciones como el Ministerio de Turismo, La I. Municipalidad de Cuenca, El INPC, Juntas Parroquiales y Comunidades implicadas, entre otras instituciones y/o personas vinculadas al tema.
Pocas ciudades son tan afortunadas de contar con tantos componentes valiosos juntos, razones y justificaciones sobran, por lo que es imperioso, de que estas áreas sean urgentemente protegidas y puestas en valor en beneficio de la ciudad de Cuenca y de las futuras generaciones.
OBJETIVO GENERAL
Contribuir con la investigación, preservación y difusión de los valores culturales ancestrales y naturales de Cuenca y su área de influencia, enfocados en aspectos ambientales, sociales y económicos.
OBJETIVOS ESPECIFICOS
- Elaborar una investigación científica-técnica, etnohistórica y geográfica de los cerros rituales precolombinos en torno al sitio arqueológico de Pumapungo.
- Preparar una propuesta preliminar previa la declaratoria de “Bien de Utilidad Pública o de Interés Social”.
METODOLOGIA
El estudio contaría con tres fases; la primera comprenderá el capítulo de diagnóstico, que contendrá la información con todas las características de la zona y se manejarán los respectivos mapas temáticos para cada tema a ser analizado, dichos mapas tendrán como fuente la información levantada en campo por cada uno de los técnicos y la solicitada a los respectivos entes de competencia.
En un segundo momento se realizarán los respectivos cruces de variables y análisis de la situación del territorio, para en una tercera fase plantear las posibles alternativas de manejo y potencialización de la zona, con su respectiva valoración ambiental, histórico- cultural y turística.
La Línea Base o Diagnóstico contará con los siguientes contenidos:
I.-AMBIENTAL
Marco legal
Climatológica
Geomorfología
Geología
Pendientes
Hidrología
Zonas de vías
Especies endémicas
Especies en peligro de extinción
Valor paisajístico
II.-SOCIO-ECONOMICO
Indicadores sociales
Población
Analfabetismo
Servicios básicos, etc.
III- ARQUEOLOGIA E HISTORIA DEL AREA:
Información relacionada con el área.
Georeferenciación de las áreas culturales
Paleoindio o pre cerámico
Formativo Tardío
Desarrollo Regional
Integración
Inca
Colonial
El análisis de la situación actual al territorio y sus posibles alternativas de manejo y proyectos serán realizados a través de un SIG (Sistema de Información Geográfica), lo cual proveerá las herramientas fundamentales para la toma de decisiones a futuro, todos los “shapes” y bases de datos generados serán entregados en formato digital e impreso dentro del documento final donde se presentará la valoración y respetivas alternativas de proyectos: ambientales, culturales, turístico y económico para la zona de estudio.